La manifestación. El arte de crear.

Se dice que Miguel Ángel afirmaba que lo que él había hecho era liberar a David del bloque de mármol en el que se lo había encontrado. “El cuadro tiene vida propia. Yo intento dejar que salga”, dijo Jackson Pollock.

En Física Cuántica nos dicen que todo está ya creado, esperando que un observador tome conciencia de ello para manifestarse en la materia.

El miedo es el que frena al ser humano en su capacidad creativa. Pero el miedo está solo en la mente, no en el alma ni el espíritu. En el momento en el que eres capaz de detectar ese temor, ya lo has paralizado, lo bloqueas, es una manera de decirle “eh, tú, te he pillado, te he visto, ahora estás en la luz y ya no puedes hacerme daño”. Y entonces llega el momento sublime de la liberación. Experimentas la paz de sentirte libre y la maravillosa sensación de que eres poderoso, brillante, único y capaz de lograr todo lo que te propongas. Tu trabajo a partir de ese momento consiste en tomar acción. Hazlo. Empieza. Si es escribir un libro, escribe las primeras letras, las que sean, aunque luego las cambies por otras, tú sólo empieza, si es montar una empresa, empieza, habla con otras personas que puedan ayudarte, siempre hay gente que necesita lo que tú les ofreces, siempre. Es la parte más difícil, es como bajar al pozo, es enfrentarte a tu oscuridad, a todas tus dudas, pero es el paso necesario para conseguir subir el peldaño siguiente, el de la confianza. Porque una vez que empieza el proceso de creación, el Creador te apoyará, te dará todo lo que necesites para su realización, ¿sabes por qué?, pues, primero y principal porque te ama, y segundo porque él también es un creador, todos somos artistas, y a los artistas nos gustan los otros artistas.

Sé receptivo a su ayuda. Acéptala. No la frenes con pensamientos como que lo que haces no vale lo suficiente, que no eres lo suficientemente bueno, que es frívolo o superficial, que hay otros que lo hacen mejor, que Dios sólo ayuda en cosas espirituales, porque no es así. Dios no juzga, jamás lo ha hecho ni lo hará, porque Dios es amor puro incondicional, y dentro de esa frecuencia no existe el juicio. Dios es sólo un espejo en el que se reflejan tus deseos. Ya está. Es así de sencillo. La Física apoya esta concepción del Universo, nos dice que las partículas subatómicas viven en la potencialidad pura, siendo y estando en varios lugares a la vez, como infinitas posibilidades hasta que el observador, o sea, nosotros, las limitamos con nuestro pensamiento y emoción, cuando hacemos eso, se convierten en una sola posibilidad, la que tú elijas.

Así que, si deseas con todas tus fuerzas ver tu sueño hecho realidad, acepta la ayuda del Universo, sé receptivo, ¿cómo?, confiando, confía, ten fe, siéntete amado por el Universo, siéntete protegido y acompañado y fíate de tu intuición. Eres poderoso. Eres valiente. Eres único. Y estás aquí para divertirte y ser feliz. No hay deudas kármicas. Nadie juzga a nadie. Todo es perfecto tal como es. Vive la vida. Disfrútate. Un abrazo de luz.

FUENT http://www.reconciliacioncuantica.com